Química.

En Septiembre hice un cambio que a mi me ha supuesto mucho. Me vine a Murcia a estudiar una carrera de la cual no estaba segura y ahora me he dado cuenta de que esta no es la que quería, y aunque sea algo que le puede pasar a mucha gente es algo que no es difícil de llevar, y lo peor aún es que no sé qué carrera es la mía. La gran mayoría de personas dan este paso sabiendo de antemano qué es lo que quiere y por lo que están dispuestos a luchar, en mi caso, y espero que en el de muchos otros, nunca he tenido esa pasión por nada, nunca he tenido algo que me llenase del todo como para saber que me quiero dedicar a ello. Cuando esto se lo cuento a mis amigos me dicen lo típico, que no me preocupe que encontraré aquello que es para mi, pero yo no lo creo así.
Desde pequeñitos nos someten a una presión que no es la adecuada para gente de nuestra edad. Desde los 16 te obligan a elegir un camino que no sabes si va a ser el tuyo. Yo en ese momento elegí las ciencias aunque muchos profesores me aconsejaron tanto a mi como a mis padres que no fuese por ese camino, y por supuesto no estoy arrepentida de ello. A los 18 tienes que optar por una carrera de la cual va a depender tu futuro, y cuando lo hagas si te equivocas puede que no haya marcha atrás. ¿De verdad se creen que una persona a esa edad es consciente de lo que quiere? Yo no lo creo así, y seguiré sin hacerlo, pero nada sirve quejarse si así es como lo han decidido.
Para mi ha sido muy difícil decirles a mis padres que esta carrera no es la que yo quiero, ya que todo lo que he hecho, y llegar a donde he llegado (cosa que mis hermanos no fueron capaces), ha sido por ellos, para que estuvieran orgullosos y para que vean que al menos uno de sus tres hijos ha elegido el buen camino. Desde pequeñita mis hermanos han sido el espejo donde mirar, mis pasos a seguir, a mi hermano por su seguridad y a mi hermana por su fuerza, pero de lo que sí que estaba segura es que respecto a los estudios tenía que ser totalmente diferente a ellos, y de momento lo he conseguido aunque aún no está todo hecho. Después de confesárselo a mis padres me quedé algo más tranquila, como si me hubiera quitado un peso de encima aunque aún me quedasen muchos otros.
A parte de mis dudas de futuro se le añade mi estancia en Murcia, algo que desde hacía mucho tiempo deseaba como otros muchos, el pensar en esa libertad que todos anhelan, pero al llegar aquí todo fue distinto. Al principio pensaba que era normal que no me acostumbrase a la casa, a depender de mi misma, a estar lejos de mi familia y de amigos los cuales por desgracia se quedaron en mi pueblo querido por unas cosas u otras, pero ahora me he dado cuenta de que no es así. Cuando el resto de mis amigos ya se han amoldado y les encanta estar aquí yo sigo sin acostumbrarme a esto y echando de menos todo por lo que durante muchos años me he quejado y quería perder de vista. No es fácil estar en un sitio donde no quieres estar y  más si estás haciendo algo que no quieres hacer (me refiero a la carrera que elegí). Esto es algo que también temía decirles a mis padres pero que también lo hice, y como siempre lo único que me pudieron decir es que aguante.
¿Para qué es todo este rollo? Ni yo lo sé, necesito contárselo a alguien que no me diga todo lo que ya estoy harta de escuchar, y en este caso no voy a obtener respuesta, así que mejor. Seguro que si esto le pasa a cualquiera de mis amigos yo les diría lo mismo que ellos me están diciendo a mi, pero no es lo mismo lo que se ve por fuera que lo que se vive por dentro, es un malestar continuo contigo mismo.
Y por último se debe añadir el tener que aguantar saber que a toda la gente que te rodea le va genial y están felices con lo que están haciendo menos a ti, y cuidado, con esto no quiero decir que no me alegre por ellos, estoy orgullosa de ellos como la que más pero no puedo evitar sentir envidia; envidia sana como se suele decir por querer tener y sentir eso que todos tienen menos tú.

¿Por qué me fui y por qué he vuelto?

Guiándome por mi última entrada publicada sé que hasta hoy hace 2 años, 5 meses  y 11 días que no escribo nada.

En verdad nunca me he preguntado el porqué dejé esto a un lado, supongo que porque encontré otras cosas que lo sustituyeron, lo encontraría una pérdida de tiempo cuando supe otra forma mejor de hacerlo. No lo he echado de menos en ningún momento, incluso ahora tampoco, y sinceramente ni yo sé por qué estoy aquí de nuevo.

La vida se basa en suposiciones, así que vamos a echar mano de ellas para buscar alguna respuesta.

Siempre he dicho que tengo mala memoria, aunque no para todo, y como era de esperar no recuerdo cómo llegué hasta aquí, es decir, cómo llegué a hacerme un blog. Bueno miento, una amiga fue quien me dijo que me hiciera uno y yo tonta de mi me lo hice sin saber ni siquiera de qué trataba ni para qué servía, pero si eso era la nueva moda yo tenía que seguirla. Supongo que empecé a escribir cosas que me encontré por ahí, y puedo decir eso porque estoy 100% segura de que mi primera entrada no es mía y cualquier persona puede darse cuenta, esas palabras no son de una cría de unos catorce o quince años, o quizás sí, pero  si sigues leyendo mis otras entradas es fácil darse cuenta: muchas más faltas de ortografía, otra manera de expresión, palabras más coloquiales... En fin, se ve fácilmente que las que de verdad son mías se trata de una niña intentando aparentar más edad intelectualmente, poniendo palabras más "cultas" aunque no queden bien en el contexto, o hablando de sentimientos que ni siquiera después de 3 años he experimentado. Triste, ¿verdad?

También he de suponer que estaba en la edad del pavo (aunque con eso no quiero decir que ya haya salido de ahí), es evidente, solo hablo de amores no correspondidos, cosa que ni siquiera yo quiero leer porque me avergüenzo de todas y cada una de las palabras que escribí, pero bueno, le seguiré echando la culpa a la edad y así podré excusarme de todo lo vergonzoso que pueda poner en esas entradas..
Por otro lado he de afirmar que soy una dejada, todo lo que empiezo lo acabo abandonando, así que supongo que esto es otra de tantas cosas que he olvidado a lo largo de mi vida; mirar si soy una dejada que hará un mes que empecé esta entrada y por gandula no la he terminado hasta hoy, o al menos eso espero.Y es que yo no puedo escribir si no estoy inspirada, si no es mi cabeza y mis manos las que me lo piden, y vosotros pensaréis, ¿inspirada para escribir estas cuatro tonterías? Pues sí, hasta para eso necesito algo de motivación ya que últimamente hay pocas cosas que lo hagan en mi vida. Me acuerdo que de pequeña mi madre me decía que tenía un don, tenía una imaginación prodigiosa para inventar cuentos y luego para proyectarlos sobre el papel y después de tantos años sigo sin creerla. Tendría la imaginación que cualquier otro niño, solo que yo dejaba que los demás lo vieran mientras otros se la guardaban para ellos..

Después de toda esta mierda ¿vosotros habéis encontrado el porqué he vuelto o el porqué me fui? Os decantaréis por mi último suponer, mi vaguería me gana, yo creo casi que también, es más, a saber cuando vuelvo a escribir algo, pero bueno, no me preocupa. Lo seguiré haciendo siempre y cuando tenga tiempo y ganas, y como esta mierda de blog tampoco le interesa a nadie, solo a mi para desahogarme pues tampoco es que importe mucho si vuelvo a hacer otra entrada o no, aunque por mi bien espero que sí.

Por último quiero decir un consejo, aunque no será la primera vez que os lo digan y aunque luego yo no me lo aplique, y es que espero que todo lo que hagáis en vuestra vida no sea por los demás, sino porque vosotros verdaderamente estáis seguros de ello, porque queréis hacerlo, porque lo necesitáis, me da igual, siempre  y cuando sea por vosotros mismos.

Hablad si quereis pero antes escuchadme.

Vale, no soy de esas personas a la que todo el mundo quiere tener al lado, no tengo un cuerpo diez ni soy superdotada, es mas, soy cotilla, arrogante, maniática, con carácter, bipolar y sobre todo cabezota, pero se que cada uno de mis defectos me hacen ser única.
No te aconsejo que me conozcas si no tienes paciencia, conmigo la necesitas porque nunca sabes como voy a reaccionar, aunque si la tienes adelante porque cada día conmigo sera una aventura nueva.
Si me pillas de malas lo mejor que puedes hacer es dejarme en paz, puede que salgas perdiendo aunque tu no tengas nada de culpa, suelo pagar mis problemas con los demás y sobre todo si se entrometen mucho en mi vida, aunque puede que tengas suerte y directamente pase de ti. Pero si me pillas de buenas es lo mejor que te puede suceder, prepárate para un día de emociones y diversión, tan solo dame una tarde conmigo y te haré disfrutar como nunca.
Suelo culpar mi mala suerte a mi físico porque se que la sociedad de hoy en día tan solo se fija en eso pero en verdad no me importa porque la gente que de verdad sabe como soy me valora por mi forma de ser y hasta ahora por lo que yo se nadie se arrepiente de haberme tenido a su lado.
Me considero una chica demasiado cariñosa, alegre y extrovertida, a las personas mas cercanas a mi jamas le ha faltado cariño y siempre que han estado mal les e hecho sonreír como nunca antes lo habían hecho porque para mi que los demás sean felices es esencial.
Odio a la gente falsa y aquella que se deja llevar por los demás aparentando lo que no son, así lo único que consiguen es mentirse a ellos mismos.

Ahora que sabéis un poco mas de mi es cuando podéis opinar y criticar pero os adelanto que nada de lo que penséis sobre mi me va a hacer cambiar.

¡Tú! Si tú...

...Mírame atentamente.
¿Ves las lagrimas que derramo al cabo del día?
Tú eres el culpable de cada una de ellas.
Suelo ser fuerte y me aguanto todo lo que siento, tan solo por no parecer débil delante tuya, pero el que me veas cada día con una sonrisa no significa que por dentro no esté llorando, incluso cuando te das la vuelta aprovecho para desahogarme.. Y es que son tantas cosas las que siento por ti que son algo difíciles de guardar.
Llámame cobarde si quieres pero me rindo.. No porque ya no sienta nada, sino todo lo contrario, son demasiadas cosas acumuladas y no me veo con fuerzas ni de seguir luchando por algo que se que no acabará bien.
No por esto quiero que te sientas mal, todo lo contrario, quiero que te des cuenta de que si ahora siento esto es porque antes del dolor hubo sentimientos de los cuales no me arrepiento porque gracias a ellos pasemos momentos increíbles que sin dudarlo volvería a repetir una y otra vez.

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En esta vida te pueden suceder todo tipo de problemas que te marcarán de por vida y cada uno de ellos los tendrás que afrontar de distintas formas, por ello debes de saber elegir bien el camino que quieras seguir ya que un paso mal dado puede llegar a ser un gran error del que no podrás salir.

Mi pesimismo no es sino una variedad del optimismo.

Dicen que todo tiene un lado positivo, que la vida es muy bonita, que si luchas por lo que quieres lo consigues, que si sonries todo es mas fácil, que si crees en los demas todo te irá mejor, que si confias en ti misma llegarás mas lejos..

¿Pero para que me sirve creer en todo esto si todo se reduce a una sola cosa?

LA MUERTE.
Aquel sustantivo, adjetivo, verbo, al que TODOS tenemos miedo.

¿Y porque todo se reduce a esto? Os preguntareis.

Es muy fácil.

Tú puedes ser la persona mas optimista del mundo, pensar que todo es bello y que nada te puede salir mal, pero nada de eso tiene sentido si al fin y al cabo todo lo que hagais en vuestra vida quedara en el olvido cuando quedes enterrado bajo tierra o hecho ceniza, todo aquello por lo que hayas luchado en esta vida no habra servido para nada porque cuando pasen unos años despues de tu muerte todo el mundo te abra olvidado.

La mayoria de las personas piensas que los pesimistas son unos amargados, personas que no saben lo que dicen, que lo dan todo por vencido antes de intentarlo, etc. Pero lo que de verdad no saben es que los pesimistas somos aquellos que ya hemos pensado mas de una vez en ese concepto de vida y que como es normal no les agrada. No es que no lo intentemos, tan solo que ya sabemos lo que nos toca en un futuro y no nos sirve de nada engañarnos a nosotros mismo decorando con florecillas nuestras vidas para que luego cuando llegue la hora de la verdad no sea tan duro de afrontarlo.

Nadie se merece que le hagan daño pero en cambio siempre se sufre

Dolor, tristeza, sufrimiento, mal estar, lamento, disgusto, amargura, pesadumbre, pena..
Nada ni nadie debería de hacerte sentir así pero sin embargo siempre lo consiguen, puede que lo hagan queriendo o que simplemente no se den cuenta de las consecuencias que puede causar pero por errores sin importancia para algunos, han ocurrido desgracias de las cuales no hay vuelta atras.
Desgracias irremediables, daños irreparables, suicidios.. 
Tanto para nada, tan solo por que a alguien en un momento dado le apetece hacer daño y escoje a la persona mas indefensa para comenzar con un maltrato el cual no viene a cuento, da lo mismo si es físico como psicológico, el caso es hacer daño y les da igual lo que puedan llegar a sentir los demás.

Con todo esto me pregunto: ¿Os sentis bien así?